(Extraído de Camino de Olduvai, Ed. Irrecuperables, 2023.)
Se acaban las energías fósiles
y volvemos la vista con simpatía
hacia las centrales nucleares.
Se acentúa el cambio climático
y todo lo que se nos ocurre
es poner más fuerte el aire acondicionado.
Se anuncian grandes hambrunas
y corremos hacia el supermercado.
Afirman próximas guerras por el agua
y comprobamos el filtro de nuestros purificadores.
Advierten de grandes migraciones hacia el norte
y preguntamos si la valla resistirá.
Aumentan las desigualdades sociales
y cambiamos de cadena.
Vaticinan la muerte de 2/3 de la humanidad
y nos aseguramos de estar en el paralelo adecuado
para salvarnos.
El mundo se hunde
y los políticos se dedican a besar niños
y nosotros a llenar la nevera.
Ciegos y bobos,
somos una especie muy extraña,
pensamos bien y actuamos mal,
y así nos va.